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Barbie y Max Steel también pueden estar a la moda
Sin duda alguna, los protagonistas de este mes son los niños. El 30 de abril conmemoramos a las infancias y ahora más que nunca necesitamos estar atentos a sus necesidades, pues están viviendo una pandemia que vino a transformar su cotidianeidad.
El juego es una excelente estrategia para entretenerse en circunstancias difíciles, pues la imaginación nos permite crear un espacio positivo emocional y físicamente. Pensemos en cuando éramos niños, ¿cuántas tardes no pasamos imaginado cómo sería nuestra vida adulta? Jugábamos a ser médicas, abogados o maestras. Dábamos vida a nuestros muñecos con nuestras voces o creándoles guardarropa con retazos de tela y pastillas para pintar ropa; todo era una proyección de lo que imaginábamos podría ser nuestra vida.
Carol Spencer es una mujer que también tuvo ese ímpetu y seguramente usó muchas pastillas para pintar ropa en su infancia, pues es una de las diseñadoras emblemáticas para Barbie (con más de 60 años en el mercado). Incluso escribió su experiencia de diseñar ropa para este ícono de la infancia y la moda en su libro Dressing Barbie, donde desmenuzó su proceso creativo, los mejores momentos de sus colecciones y los retos más importantes al tener que crear prendas para una modelo tan particular.
Carol estudió diseño de moda casi como inercia, pues en su época era muy difícil que las mujeres pudieran desarrollarse en otros ámbitos fuera del trabajo doméstico. Ella tenía una inquietud por explorar su lado creativo y esa fue la mejor alternativa que pudo tomar… Después de haber probado varios años en otras empresas, llegó Mattel 4 años después del lanzamiento Barbie al mercado.
A lo largo de su carrera hizo innumerables vestidos para la muñeca, mismos que se exponen en su casa en Los Ángeles; creó muchos de los vestuarios más icónicos, incluso, hoy en día podemos verlos en películas como Toy Story. Después de 35 años de trabajo, Carol decidió alejarse de las pastillas para pintar ropa y las tijeras, retirándose en 1998 de Mattel con un legado que todos recordaremos por décadas.
Ese mismo año, Mattel creó una serie al estilo James Bond, pero con un aire más aventurero, para los más pequeños de la casa. Max Steel fue un personaje fundamental en los juegos de los niños durante los primeros años de la década dos mil y no sólo por sus aventuras… ¡también por su ropa! Notorios cambios de prendas militares, aventureras y deportivas que no estaban necesariamente relacionadas con la serie, sino con una figura de acción completamente a la moda, volviéndolo un importante referente visual.
Todo nuestro equipo te invita a celebrar a los niños, a cambiar de color sus días, a hacer de la imaginación el mejor superpoder con el que puedan contar toda la vida.
